Cuántas cosas vienen y se van con los cambios de estación. Se cambian los pantalones cortos por los largos. Se guardan blusas y se sacan americanas. Aumenta la probabilidad de frío y lluvia. Por otro lado, disminuye la probabilidad de derretirse al salir de casa. Se enciende la calefacción y no se piensa, en ningún momento, en el aire acondicionado.
Estas son cosas que a lo largo del año cambian de estación en estación, pero hay otras que jamás cambian. Como es esta preciosa casa luminosa y espaciosa a más no poder. Da igual la estación en la que nos encontremos del año que la luz que entra en esta casa es impresionante. Gracias a estos enormes ventanales que nos dejan sin respiración tenemos unas vistas del entorno fascinantes. Esta casa se encuentra en medio de la naturaleza, alejada del ruido abrumador de la ciudad, transmitiendo mucha paz y tranquilidad.
Algun@ que otro estará pensando lo mismo que yo: «madre mía para limpiar tanta ventana». Desde luego, después de limpiar cada una de las ventanas que tiene esta casa no haría falta pagar el mes de gym jeje pero, aun así, no puedo negar que esta casa es asombrosa se mire como se mire.
De estilo contemporáneo y vanguardista con un toque industrial gracias a las paredes de esta casa con efecto cemento. Un espacio elegante donde predominan los colores fríos (blanco, gris, verde y tonos neutros), muebles de madera para crear un ambiente cálido y acogedor. También, tiene algún detalle en color cálido como son las sillas rojas anaranjadas que se encuentran en la terraza.
En resumen, ¡nos ha encantado esta espectacular casa! muy espaciosa y llena de luz. Con una decoración muy sencilla y pura, pero que no deja nada que desear, ya que, todo esta cuidado al mínimo detalle. ¿Y tú qué opinas? ¿Te ha gustando tanto como a nosotr@s?
Un beso 🙂
Samanta Guidi Sánchez